El transporte de mercancías a granel es una necesidad para poder enviar productos que no pueden ser embolsados o empaquetados. Cada día es necesario mover miles de toneladas de esta clase de productos para abastecer los mercados de todo el mundo de productos básicos. Para ello se necesitan medios de transporte que cuentan con particularidades únicas.
Los tipos de mercancía a granel
Se trata de la carga que se transporta sin embalar o empaquetar y en grandes cantidades. En este caso, se usa como elemento de contención el propio transporte, lo cual implica la necesidad de contar con medios específicamente diseñados.
A la hora de calcular la cantidad de material que se transporta, se recurre a su masa o su volumen en lugar de a las unidades.
Dentro de los productos transportados a granel existen dos categorías diferenciadas que incluyen elementos de uso diario. Como empresa de transporte experimentada sabemos cómo mover este tipo de carga.
Mercancía a granel líquida
Se trata de aquel producto que puede fluir libremente y que requiere elementos de bombeo y tuberías para su carga y descarga. Es decir, se trata de materia en estado líquido que debe transportarse en tanques o depósitos. Dentro de esta categoría se engloban productos como estos.
- Químicos
- Aceites
- Petróleo
- Gas natural
Mercancía a granel sólida
Para poder cargarla y descargarla se emplean tolvas, cintas transportadoras y grúas. Este trabajo se lleva a cabo desde su punto de origen al destino final, incluyendo los diferentes puntos de distribución. Entre estos productos se pueden encontrar los siguientes.
- Granos, como el trigo o la soja.
- Minerales, como el carbón o la bauxita.
- Fertilizantes y resinas.
- Madera.
- Alimentos, como plátanos u otras frutas y hortalizas.
Tipos de transportes de la mercancía a granel
Para hacer un transporte eficaz de esta clase de mercancías es necesario contar con los medios y la logística necesaria para ello. Esta clase de productos suele recorrer grandes distancias por mar y tierra, por lo que existen transportes específicos para poder moverlos con seguridad y conseguir que lleguen íntegros a su destino.
Marítimo
El transporte marítimo es el más frecuente a la hora de desplazar este tipo de mercancía. Para los elementos sólidos se utilizan los conocidos como bull-carriers, que cuentan con bodegas de gran envergadura cerradas por escotillas que componen la cubierta. En el caso de las frutas y hortalizas, disponen de refrigeración.
Para los líquidos, los petroleros y los buques tanques (depósitos en lugar de bodegas) son los de elección.
Terrestre
Una vez en tierra, es necesario seguir moviendo la mercancía. El transporte ferroviario suele ser una de las soluciones, ya que cuenta con depósitos adaptados, como vagones y elementos de carga libre. También con camiones cisterna (de gasolina o leche) o de tipo volquete.
Aéreo
La carga aérea a granel es mucho menos común debido a su coste y a las dificultades que entraña. Se trata de una opción difícil de elegir y encontrar.
Una empresa de transportes con experiencia
Para llevar a cabo este tipo de trabajos es preciso coordinar diferentes medios y contar con espacios logísticos para realizar los trasvases de carga. Una empresa de transporte con experiencia es la mejor solución para conseguir que la mercancía llegue perfectamente a su destino.
El transporte de mercancía a granel implica mover productos sin empaquetar, por lo que requiere el uso de vehículos terrestres y marítimos diseñados específicamente. Para conseguir el traslado debe coordinarse el trayecto y el cambio entre los diferentes medios de transporte que vayan a realizar el trabajo. Para ello es imprescindible el concurso de una empresa con experiencia en el sector como la nuestra, Grupo Caliche.